En un contexto de intensa actividad política, el Gobierno argentino se encuentra en las últimas horas para conseguir un dictamen favorable para el Presupuesto 2024. El presidente Javier Milei, que actualmente participa de la cumbre del G20 en Brasil, regresará el miércoles a Buenos Aires, justo cuando finaliza el plazo legal para discutir la propuesta. Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, lidera las negociaciones con los bloques de oposición, especialmente con aquellos cercanos a La Libertad Avanza (LLA).

Las expectativas son altas, ya que el oficialismo busca el apoyo del PRO y la Unión Cívica Radical (UCR). Sin embargo, desde el Gobierno hay desconfianza respecto a que estos partidos respalden el dictamen propuesto por Encuentro Federal. En contraposición, la oposición advierte que la versión presentada por Unión por la Patria podría obtener la mayoría, lo que complicaría el tratamiento del presupuesto original. El Gobierno sostiene que es crucial que la ley respete la regla del déficit cero, un principio que buscan mantener.

Por otro lado, el debate también incluye la propuesta de eliminar las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), lo que, según estimaciones, podría liberar recursos significativos. Aunque esta medida genera divisiones incluso dentro del PRO, el oficialismo planea presentar el proyecto de eliminación en los próximos días.

Contexto

Este escenario se desarrolla en un marco donde la necesidad de consensos es vital para la estabilidad política y económica del país. En Argentina, la aprobación del presupuesto es un paso crucial para garantizar la continuidad de políticas públicas y el funcionamiento del Estado. En este sentido, las negociaciones entre el Gobierno y la oposición podrían abrir un espacio para el diálogo y la construcción de acuerdos que favorezcan la gobernabilidad.