En un contexto económico donde las acciones y bonos argentinos se mantienen en niveles máximos del año, los dólares financieros, tanto el "contado con liquidación" como el MEP (Mercado Electrónico de Pagos), han disminuido por sexta jornada consecutiva. Este descenso se registró el 20 de noviembre, con el "contado con liqui" operando a $1.111 y el MEP a $1.073, valores que no se veían desde mayo. Este fenómeno se traduce en una reducción de la brecha cambiaria, que ahora se sitúa en un 10,7% respecto al "contado con liqui" y un 6,9% en relación al MEP, marcando una tendencia positiva desde el último trimestre.

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) ha estado interviniendo activamente en el mercado, acumulando aproximadamente USD 20.387 millones en compras netas desde la asunción del presidente Javier Milei. Esta intervención ha sido clave para estabilizar el mercado y facilitar el acceso a divisas para las empresas, que ahora encuentran más conveniente obtener dólares a través del segmento bursátil en lugar de recurrir al mercado cambiario tradicional.

El optimismo de los inversores también está respaldado por la reciente caída de la inflación mayorista a niveles históricos, con un registro del 1,2% en octubre, el más bajo en 53 meses. Esto sugiere que las políticas económicas están comenzando a tener un efecto positivo en la economía argentina.

Contexto

La situación actual puede interpretarse como un indicio de normalización económica tras años de incertidumbre. La reducción de la brecha cambiaria y la caída de los precios de los dólares financieros reflejan una mayor confianza en el futuro económico del país. Además, el reciente blanqueo de capitales ha inyectado liquidez al sistema, mejorando la oferta de divisas y facilitando créditos a privados, lo que puede ser un motor clave para el crecimiento económico. En este sentido, es importante seguir de cerca las políticas implementadas por el gobierno, que buscan controlar la inflación y estabilizar el tipo de cambio de manera efectiva.